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El alhelí es una planta de exterior con características muy peculiares, con fines decorativos y estético, por la belleza de sus flores y por su agradable aroma. También conocida como alhelí dorado, flor de muros y alelí, es una planta cuyos colores característicos son el naranja, amarillo, rojo, blanco y violeta.

El alhelí  amarillo, planta que florece en primavera, data sus orígenes en el Continente Asiático y hoy en día la encontramos de manera más cuantiosa en Europa.

Decorando balcones y terrazas o sembradas directamente en el suelo, estas hermosas plantas pueden alcanzar hasta 80 cm. de alto y no requieren de un cuidado tan exigente, además de cultivarse de manera fácil y tampoco necesita de una gran preparación del terreno. 

Con respecto a sus hojas, son medianas y lanceoladas, se mantienen verdes casi todo el año y su follaje es el denominado perenne.


Usos del alhelí amarillo

Al ser una planta ornamental su uso principal es del decorativo, sin embargo, tienden a utilizarla en infusiones y té para ciertos problemas renales, ya que posee efectos diuréticos. 

Es importante destacar que su empleo debe ser con precaución, motivado a que no está demostrado su uso medicinal.

En jardines amplios es donde más se disfruta su presencia, por sus colores tan llamativos y el encantador perfume de sus flores. Existen muchas zonas de Europa que las colocan en las laderas, pendientes, faldas y caminos que decoran majestuosamente paisajes dorados.

La mejor época para su siembra o multiplicación es el otoño, para que así ya en primavera nos otorgue su brillo y delicadeza. Para su reproducción se utilizan semillas las cuales de cultivan de manera sencilla.

El terreno no necesita adicionar muchos preparados ni abonos, con arena y ceniza sería suficiente.

En lo que se refiere al riego, debe ser moderado y evitando que se estanque, puede ser entre una vez cada 5 a 6 días máximo.


Enfermedades y plagas

Estas plantas enfrentan varias plagas o ataques, entre ellos están: 

Hernias en las raíces: crecen de manera deforme que provocan pudrición y afectan el crecimiento de la planta.

Albugo cándido: es un alga que produce un hongo, nace justo en la floración impidiendo su nacimiento.

Botrytis: es otro hongo que enferma a los capullos impidiendo el nacimiento de sus flores.

Mildiu: es un hongo que se conoce porque macha las hojas con un color marrón y hace que mueran los brotes y los tallos.

Oruga de la col: estas nacen en la planta y se come las hojas impidiendo su crecimiento saludable.

Polilla minadora: ataca a la planta desde la larva, alimentándose de sus hojas, volviéndose mariposilla Plutella maculipennis.

Chinche de las crucíferas: son muy vistosos debido a sus colores, succionan la savia de los tallos y hojas dañando las células de las plantas.


Como curar estas enfermedades y plagas

Hay muchas maneras de contrarrestar estas enfermedades, van desde quemar las plantas dañadas, romper o podarlas. Otra de las soluciones está, evitar el riesgo excesivo que impida la propagación de hongos.

Con respecto a las plagas, existen varias fumigaciones con rociadores que disminuyen la invasión. Además de muchos tratamientos caseros que funcionan tanto como repelentes como insecticidas naturales.

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