Frutales

El cultivo de frutales, una deliciosa aventura

Sembrar árboles frutales en nuestras áreas externas nos garantiza un alimento nutritivo y muy apetitoso, además son muy llamativos a la vista, sobre todo cuando están en períodos de floración, lo que constituye una verdadera belleza ornamental. Si bien para su cultivo se debe tener un mínimo conocimiento de Pomología, lo cual se refiere a las técnicas de cultivo y el estudio de los árboles frutales, esto no limita que puedas disfrutar de los placeres que te puede brindar la tierra.

Son innumerables la cantidad especies frutales que puedes cultivar en tus terrenos o jardines, las cuales puedes comprar aquí que somos tu vivero de confianza. Entre ellas podemos mencionar el Almendro, kumquat, Melocotonero, Peral, Níspero, Manzano, Durazno o aguacate. Pero si eres amante de los cítricos puedes colmar tu jardín de multicolores especies con árboles como el limonero, el naranjo, la mandarina, el pomelo o la lima. Al haber elegido el frutal más conveniente a tus condiciones y gustos, surgen algunos aspectos que debes considerar para su sembrado y mantenimiento, a los fines de garantizar un fruto apetitoso y de buena calidad.

Un buen preparación del terreno antes del trasplante

Abona previamente la tierra con un fertilizante adecuado como el humus de lombriz. Ello ha de hacerse por lo menos con un mes de anticipación. El tiempo más recomendable para que siembres tus árboles frutales es aquel donde no haya riesgo de heladas que frenen el surgimiento de nuevas raíces. 

Fertilizado y Riego

Para mantener tus cultivos sanos y en pleno desarrollo debes aplicar un fertilizado constante, por cuanto estos son los que más nutrientes consumen. Se debe adecuar el riego a cada especie de fruto, considerando los cultivos como olivos, almendros, granados e higueras, que no necesitan demasiada agua.

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